Gay Erotic Stories

Esto fue mi viaje a la Gran sabana el 18/12/98 ---------------------------------------------- Era las 5 de la tarde, el sol se estaba poniendo en el horizonte, desde el autobús de la Universidad podía ver unos grupos de amigos y yo ese juego de nubes de muchos colores, el cual se posaban sobre el monte RORAIMA y el CUQUENAN de La Gran Sabana. Habíamos viajado por 9 horas desde Pto. Ordaz. En el autobús había 7 muchachas con edades entre 17-26 años y 5 chavos con edades entre 14-22 años y el viaje era puramente conservacionista hacia unas poblaciones indígenas de esa zona. Llegamos a una zona donde había como tres caminos que según el guía llegaban al mismo sitio, entonces, nos compartimos las provisiones y cada cual agarró su bolso de camping y nos dividimos en tres grupos de 4 p/g empezamos a caminar; muchos vestíamos con shores (pantalones cortos) y franelas ya que había mucha calor (pese a que estaba bajando el sol). Hubo un muchacho llamado Cesar que desde que salimos desde la ciudad me sacaba conversación y se sentaba en el puesto al lado mío para conversar de como él alzaba pesas y como mantiene sus piernas, glúteos, bíceps y pectorales y hubo veces en el mismo viaje se dormía (o simulaba estarlo) y me recostaba sus nalgas de mi pierna y las cerraba y habría. Ese señor se cambio de ropa para poder caminar conmigo y dos muchachas; se puso unos licras y un short bastante pequeño y se quito la franela. Yo no me quedé atrás, también me quite la franela, pero yo andaba con unas bermudas como las que usan los surfistas. Caminamos en pareja, las chicas iban atrás de nosotros; íbamos hablando de como yo mantenía mi abdomen y las loqueras que habíamos hechos cada uno por su lado en la universidad. De pronto a las muchachas le dio por ir al baño y nos pidieron que las esperemos para así hacer sus necesidades. Una vez solos, él empezó a acercárseme con la intensión de comentarme una jugarreta que le íbamos hacer a las muchachas, de pronto su boca la empezaba a sentir en mi oreja y su aliento caliente mezclado con sus labios fríos empezaron a ruborizarme mientras él me estaba contando. De pronto yo le agarré la cintura para despegármelo, pero cuando lo hice sus manos me agarraron el cuello y empezó a decirme cosas como "Sé que tú eres pa´lante para cualquier vaina así que me puedes ayudar a cumplir mi fantasía". Mientras me decía esto jugaba con mis labios y hacia para besarme y no lo hacia. De pronto las muchachas empezaron a llamarnos y yo me solté de él. Ese momento no sabia a ciencia cierta que paso, puesto que el no lo conocía a plenitud para lanzar una cana al aire. Me dispuse a seguir con una de las muchachas y él con la otra. No pudimos llegar esa noche a la aldea indígena. Acampamos en el medio de la Sabana. Hicimos nuestras carpas, hicimos la comida y cada cual en su carpa. De repente Cesar me llama desde afuera a las 10:00pm para que lo acompañara al monte para que él hiciera sus necesidades. Yo lo primero que le dije que si estaba seguro de que iba a hacer eso, él me dijo que sí. Bueno caminamos unos 100mts del campamento y en un río se quitó toda la ropa, defecó y se lanzo a un riachuelo para lavarse, allí sin decir nada ninguno de los dos. Yo me quite la ropa, y le quite el jabón. Empecé jabonándolo el pelo que lo tenia largo y rubio, el se sorprendió, yo me pare pero él estando delante de mí me acerco mas y me dijo: "Deja que tus instintos te lleve esta noche". Yo asumí como sigue pa´lante. Seguí enjabonándole los hombros, los pectorales, le pedí que se saliera un poco del agua par que yo pudiera continuar. Luego le seguí enjabonando entre piernas, el glande, el ano y las nalgas. Después de eso, empece a besarlo en la boca como si fuera un animal desesperado por tratar de sacar un poco de comida de esa boca mientras lo abrazaba fuertemente, me excitaba mas al escuchar su respiración mezclada con gemidos. Le empece a chupar las tetillas y morderlas también, eso le hizo venir un poquito de leche por las tetillas y liquido preseminal en el pene cuando yo note eso, me hinque y empece a mamarle su huevo y a masturbarlo fuertemente con mis labios, mientras le metía dedo da dedo en el ano para ir agrandándoselo. Cuando sentí que casi se iba a venir me pare y lo abrasé, él me pidió que lo hiciera de él. Lo puse en cuatro y empece a meterle poco a poco mi verga de 19cm. Cuando sintió mi verga caliente empezó a gemir más y cuando lo penetré por completo y de pronto, me rogaba que se lo sacara, lo hice acostarse, lloraba y yo quería follarlo. Me acosté sobre él penetrándolo y le di un beso detrás de la oreja y en la boca por un largo tiempo. Cesar empezó a excitarse nuevamente y abrió el ano como nunca. Cuando yo vi eso medio le subí la cadera y me puse de rodillas y empece a follarlo lento y profundo. Me acosté boca arriba y empezó a cabalgarme. Por ultimo nos metimos en el río y lo cargue, lo penetre y él bajaba y subía como si mi cuerpo fuera un tronco para monear. hasta que me vine dentro de él. Esa noche durmió conmigo en mi carpa (disculpen, no dormimos teniendo juegos eróticos durante toda la noche) En la mañana seguimos y llegamos a la aldea, Era un circulo construido de pura paja y palos donde en el centro había un claro donde hacían ritos y comidas. Como a 15min de allí había dos pozas de agua, allí Cesar y yo tuvimos experiencias que solo el Río Caroní las conoce. Due to international translation technology this story may contain spelling or grammatical errors. To the best of our knowledge it meets our guidelines. If there are any concerns please e-mail us at: CustomerService@MenontheNet