Gay Erotic Stories

Cansado de manejar por casi una hora del trabajo a la casa, busco las llaves para abrir la puerta de entrada y al entrar veo a mi hija y su amigo sentados en el sofá besándose apasionadamente. Dejé caer el maletín sobre la mesa y con el ruido el susto los separó. Sus ojos asombrados se unieron a los míos y el jovencito se levantó. -Buenas tardes señor. -Buenas tardes joven. -Papi, este es Juan, un amigo y estudiamos juntos. Vino para estudiar un poco de matématicas si no te molesta. -Después que lo que hagan es estudiar, no hay problemas. Juan sin despegar la vista de mí, seguía cada movimiento. Los dejé en el comedor mientras subí a darme un baño y ponerme ropa cómoda. Como era invierno, me puse un patalón sudadera pegado al cuerpo. Para mis 37 años mantenía el cuerpo saludable ya que una buena dieta y ejercicio a mi edad es muy importante. Ojos castaños, unos 5 pies y 9 pulgadas y cuerpo atlético. Juan parecía no concentrarse ya que veía como a cada rato levantaba su cabeza y me observaba cuidadosamente pensando que yo no me percataba de sus movimientos. Juan mide unos 5 pies y 6 pulgadas y su cuepo es atlético ya que que es parte del equipo de natación de la escuela. Al ver que seguían en la mesa ordené pizza y comimos. Alrededor de las 7PM se despidió apretándome sin dejar mi mano ir. Le miré a los ojos y sonreí. Ví una luz en sus ojos de niño pícaro. Durante el fin de semana mi hija tenía que ir a visitar a su abuela en otra ciudad y se quedaría por allá hasta el domingo en la tarde. Mi esposa es enfermera y tenía que trabajar doble turno este fin de semana. Por fin tendría la casa para sólo para mí. Alrededor de las ocho de la noche, mientras miraba la televisión en el cuarto, el timbre sonó. Asombrado me asomé a mirar y para mi sorpresa, juan estaba mirando para todos lados y apunto de irse cuando abrí súbitamente. -Que sorpresa muchacho. -Buenas noches don Luis, perdone lo tarde pero es que se me quedó el libro y lo necesito para estudiar mañana temprano. -Adelante -¿Se encuentra Laura? -No, Laura está de visita en casa de su abuela y no regresa hasta el domingo. ¿te puedo ayudar en algo? -No creo, es que ella me había dicho que me ayudaría con álgebra. -Juan, no es que me quiera meter en sus cosa, pero hay algo entre tú y mi hija Sus orejas rojas como un tomate y sus manos dentro del bolsillo del pantalón qque le dejaba ver un gran bulto y unas nalgas voluptuosas. No podía creer mis pensamientos. Debo estar agotado o deseperado. -A la verdad, es que somos novios hace unos meses. -Ya me imaginaba que algo pasaba. Bueno, ya que eres como de la familia, yo te puedo ayudar con tu materia ya que yo enseño de vez en cuando álgebra. Sin más, nos sentamos en el comedor y luego de una hora comenzó a nevar y de momento caía fuerte y en gran cantidad. Juan vivía a unos quince minutos y estaba en bicicleta. La nieve estaba acumulándose, pero Juan parecía no prestar atención. Fui a la cocina y preparé un poco de cocolate y nos fuimos a la sala a ver un juego de baloncesto. Juan disimuladamente me miraba con el rabo del ojo cada segundo y pensamientos desordenados pasaban por mí sin poder controlar las emociones. Nunca había sentido algo así desde mi juventud. Al terminar el juego, Juan se despedía y fue cuando vió que la nieve se había acumulado. -Y ahora, ¿cómo voy a llegar a la casa? No sé que pasó por mi mente,-no te preocupes, llama a tus padres y explícale la situación y díle que vas a pasar la noche aquí. La idea le pareció fantástica y llamó a sus padres que no se opusieron a la idea. Continuamos la charla y cuando tuvo que ir al baño, me acosté en el suelo con las piernas sobre el sofá. Juan se sentó al lado de las piernas y seguimos hablando sobre la escuela y deportes y no sé si fue involuntariamente o no, mis piernas poco a poco iban acercándose a us cuerpo hata tocar sus muslos. Al ver que no ponía resistencia, subí lla pierna izquierda sobre la de él. juan colocó su mano derecha y comenzó a sobarla delicadamente. Me levanté y cerca de su cuerpo, mis ojos se encontraron con los suyos y nuestra respiración cada vez más agitada. Acerqué mis labios a los suyos y lo besé suavemente y como él no protestaba seguí besándolo, pero esta ve apasionadamente y tratando de meter mi lengua denr}tro de su boca a lo que él gustosamente acedió y nuestras lenguas se entrelazaron. Mis manos tocaban sus meh}jillas y las bajé a su cuello y lo abrazé fuertemente mientras nuestros labios se quemaban y la saliva pasaba de boca a boca. Nos paramos y desesperadamente comenzamos quitarnos la ropa y quedamos en bikinis bien tallados a nuestros cuerpos. Mis manos buscaban ansiosamente ese pene que iba creciendo dentro de sus calzoncillos queriendo reventar la tela. De un jalón le rompí el bikini mientras él bajaba el mío. Una vez desnudos, nos miramos y ví ese pene asombroso de nueve pulgadas y delgado y él no quitaba la vista de mis nueve pulgadas pero grueso. Inmediatamente se arrodilló y me mamaba enloquecidamente. Nos tiramos sobre el suelo y en psoición 69 nos devorábamos como niños hambrientos. Sobre él le separé las piernas y dejé ver ese ano rosadito que invitaba a una buena mamada. Comencé a pasa la lengua alrededor del ano hasta depositarla dentro de hoyo que ardía y pedía una buena lengua. -Así, papacito, así, chúpame papacito. Cómememe ese culito que te deseaba desde el primer día que te ví. Es todo tuyo papi, es todo tuyo. -Sí mi niño, es todo para mí, goza. Y en eso le comía ese culo sin compasión mientras me maba el pene y salían gotitas de semen caliente. Me le senté en su cara,-cómele el culo a tu papá, enséñame lo que puedes hacer gozar a un hombre. Siempre desde la universidad sentía atracción hacia el mismo sexo, pero siempre reprimido y miedo a mi sexualidad. Fue cuando me casé y me dediqué por completo a mi esposa y luego a mi hija aunque los pensamientos y deseos no me abandonaban. Pero esta vez la tentación fue demasiado y no iba a desperdiciar la oportunidad privada. Cómeme ese culo, eres el primer hombre que me pasa y mete la lengua dentro de mi culo. Siendo la primera vez, ¿te gusta papá? Me fascina, sigue comíendo hasta que me saques toda la leche. NO, papá, no te vayas a venir. Quiero que me agarres con ese monstruo y me hagas gozar. Quiero que me metas ese monstruo. No sé si debamos. ¿Por qué no papi? Eres el novio de mi hija. No te preocupes, que yo no lo diré si tú no lo dices y además estamos en familia. Sin pensarlo, me acosté en el piso y él se subió sobre mí besandome apasionademente y se colocó la punta del pene en su culo. Echándose hacia atrás sentí como la primera pulgada entraba y él se movía saboreando la cabeza que ya estaba dentro. Papi, que sabroso se siente, lo quiero todo dentro de mí y poco a poco seguía bajando hasta que se metió todo el pene. Se quedó un rato sentado sobre él y poco a poco fue subiendo hasta dejarlo a dentro hasta mitad. Y comenzó a subir y abajar mientras yo lo aguantaba por las nalgas para hacer más plave}centero la embestida de mi monstruo en ese culito hambriento. Los ruidos de placer eran cada vez más intensos por ambas partes. -Papi, sigue para adentro, AYYYYYYYYYYYYYYYY, que sabroso se siente, AYYYYYYYYYYYYYYY papi que rico, como te gusta metérselo a tu hijo AYYYYYYYYYYYYYYYYy metémelo más duro, asíííííííi ayyyyyyyyyy maás duro, más rápido, más duro. Papi se siente rico. Sí mi niño, se siente sabroso AHHHHHHHHHHHHHHHHHHH que rico es comerte ese culito AHHHHHHHHHHHHHHH que rico que se siente AAAAAHHHHHHHAAAAAAAH siente mi pene, aYYYYYYYYYYYYYYYYpapi. lo siento quemándome todo el culo y chocando contra la próstata AAAAAAHHHHHHHHH más duro, más duro AAAAYYYYYYYYYYYYYYYYY que sabroso es tenerte dentro. Más, dame másAHHHHHHHHHHHHHH, AAAAYYYYYYYYYY, AHHHHHHHHHHHH que rico. Y seguía subiendo y bajando tan rápido que sentía que me venía. Volteate para quedes de espalda a mi, le decía. Cuando lo hizo me levanté y quede´sobre su esplada y colocando mis manos debajo de su estómago lo abraza bamientras le embestía lo más duro que podía. Papi me quieres matar, AAAAAAAYYYYYYYYYYYYYYYYYYY que duro y rico papá. Así es que te gusta, ¿verdad? AHHHHHHHHHH. Sí papi, así es que me gusta que me agarrren. Así como agarró padrino. AYYYYYYYYYYYYY, pero el tuyo es más grande y sabroso. Sigue para adentro, AHHHHHHHHHHHhhhhhayyyyyyyyyyyy AAHHHHHHHHHHHHHH. Y mis embestidas cada vez más fuertes hasta que no podía aguantar más y comezamos a derramar leche hirviente. AYYYYYYYPapi, échame esa leche caliente en mi culo,AHHHHHHHHHHH me vengo, vénte dentro. Me vengo AAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHH me vengo, yo también me vengo papi, me la sacaste toda AAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHH. Y así caí sobre quedé sobre su espalda. Durante esa noche tuvimos sexo tres veces y al otro día hicimos el amor tre veces hasta que sus padres vinieron en su busca. Durante esa semana se la pasaba en casa y yo desesperado de tenerlo entre mis brazos, pero tenía que esperar hasta que fuese la hora de irse y yo me ofrecía llevarlo y ya en el carro nos besábamos ardientemente y a la media hora regresábamos a la casa sin que mi hija se diése cuenta. Cuidadosamente entrábamos a mi cuarto y hacíamos el amor hasta las once y lo llevaba a su casa. Así seguimos viéndonos hasta que se casaron. El día de su boda, fuí a su casa mientras sus padres y mi esposa qyudaban a mi hija. Entré a su cuarto y allí estaba en cazoncillos blancos y no pude resistir la tetación y lo agarré por detrás. sabía que vendrías. Te espera ansiosamente, se volteó y nos besamos apasionadamente y le rompí los calzoncillos y se volteó mirando al espejo y yo parado detrás de él le separé las nalgas y coloqué mi pene en la entrada de su culo y de una embestida le metí casi la mitad y gritó como loco. AYYYYYYYYYYYYYYYYque rico, métemelo duro papacito, cógeme con gusto. De ahora en adelante me vas a tener todas las noches en tu casa y me vas a hacer gozar a toda hora, AHHHHHHHHHHHHHH métemelo papacito. Así es que me gusta agarrarte mi niño. AHHHHHHHHHHHHHHH, como me gusta sentir este pene dentro dentro de tí, siempre calientito y deseoso de mi monstruo como el primer día hace siete años. AYYYYYYYYYYYYYYYYYYAYYYYYYYAYYAYYYYAYAYAYAYAYAYAYAYAYYA papi,y siempre me gusta más AYAAHAHAHAHYAYAYAYAYAYAYAYAHAHH me vengo papi, échame tu leche dentro papi AHHAYHAYHAYYY. Se dió un duchazo y llegamos a la Iglesia donde le entregué mi hija. Solo pensaba en lo felices que íbamos a ser en familia. Al salir nos hicimos una guiñada con una sonrisa pícara y mi hija sonreía irradiante de felicidad. Comentarios a ricosuave79@hotmail.com Espere la conclusión des esta historia ardiente.. Due to international translation technology this story may contain spelling or grammatical errors. To the best of our knowledge it meets our guidelines. If there are any concerns please e-mail us at: CustomerService@MenontheNet