Gay Erotic Stories

Tengo 25 años de edad, y trabajo en una oficina de consultoria desde hace como tres meses. En el poco tiempo que tengo de estar alli, he tenido la oportunidad de conocer a pocos de mis compañeros de trabajo... eso es debido a que soy por naturaleza reservado, y tengo que tomar confianza para sentirme en ambiente. No tengo mal porte. Mido 1.78 cms. cuerpo agradable, pelo castaño claro y piel trigueña. Ricardo y yo nos hicimos amigos casi de inmediato cuando lo conoci. El se parecia mucho a mi en lo de reservado, y realmente yo le eche el ojo desde que entre a trabaja. Con el pelo castaño claro, piel tersa, ojos verdes; realmente se veia muy bien en ropas de oficina, con corbata y pantalones formales. Nos hicimos confidentes uno del otro, y a la hora del almuerzo ibamos siempre juntos a un pequeño restaurante al otro lado de la calle frente a nuestra oficina. Mi predileccion por Ricardo se hacia mas evidente, aunque no se veia raro que salieramos juntos a almorzar, pues era comun que los demas lo hicieran tambien (salir en pareja). En esas salidas y entre un y otro comentario y confidencia, Ricardo me conto que aunque tenia 24 años, aun era virgen, que nunca habia tenido sexo con una mujer y que aunque tenia novia, no le apetecia tenerlo con ella. Cuando supe esto, me emocione mas, pues pense que debia yo ser muy especial para el, para confiarme tan intimos secretos. Un mes despues, me inscribi en un gimnasio que estaba cerca de mi casa, como a 5 minutos en automovil. Era de esos gimnasios con duchas abiertas, donde se pueden ver desnudos a todos los que se estan duchando, solo eran duchas que salian de la pared, sin ninguna division, por lo que me deleitaba la mirada mirando de reojo a todos los demas tipos desnudos mientras se daban un regaderazo despues de los ejercicios. Despues de dos semana, en una salida que Ricado y yo hicimos a almorzar, le propuse que se inscribiera en el gimnasio conmigo... que iriamos juntos despues de la oficina. Le propuse que ya que el no tenia automovil, nos iriamos juntos y luego yo lo iria a deja a su apartamento. El acepto gustoso, yo me relamia los labios por verlo desnudo en las duchas, pues lo convencio que era mas comodo que nos ducharamos en el gimnasio y asi llegaramos frescos a nuestras casas. El primer dia, despues de hacer ejercicios, fuimos al vestidor de hombres, y Ricardo se empezo a desnudar (aunque lo vi semi-desnudo cuando nos poniamos la ropa de deporte), pero hoy se quito la camisa sudada, dejo ver unos pectorales ligeramente marcados y con una pelusilla de vello en el centro... se quito la calzoneta y el calzoncillo tipo bikini que llevaba color azul y dejo ver una verga y unos huevos hermosos; la verga flacida de unas 6 pulgadas y unos huevos cubiertos con una ligera pelusa color castaño, casi rubio... Yo veia a Ricardo de reojo, pues no podia ser tan evidente en mi observacion... ambos nos desnudamos y fuimos a tomar la ducha. Me excitaba cada vez que lo veia, y me encato ver esas hermosas axilas peludas cada vez que levantaba los brazos y se enjabonaba el cabello. Mi verga comenzo a ponerse erecta, pero lo disimulaba volteandome hacia la pared para que Ricardo no me viera. Despues de todo, ambos nos pusimos ropa de deporte limpia, y le dije a Ricardo que lo llevaria a su apartamento. Cuando llegamos, Ricardo me invito a que pasara para que conociera. Entramos y nos sentamos en la sala y comenzamos a charlar de cosas sin importancia. Mientras estabamos en eso, yo empece intencionalmente a hablar sobre ropa. El me conto que era un sacrificio para el la ropa de la oficina, pues a el le gustaba la ropa comoda. Le dije que la comodidad empezaba por los calzoncillos, (lo hice intencionalmente para ver que me repondia). El me dijo que como ya yo me habia fijado, sus favoritos eran los bikinis. Que eran comodisimos y que los tenia en diferentes estilos y tipos. Yo haciendome el disimulado le dije: - de verdad son comodos? El me dijo que si, y poniendose de pie, se bajo la calzoneta me mostro el bikini que llevaba puesto, uno con rayas cafe del mismo tipo del que tenia puesto en el gimnasio. Los pelos de su pubis se salian por debajo del bikini lo cual me excito y me paro inmediatamente la verga. A Ricardo se le paro la verga tambien, y sin decir nada, aceque mi mano a su bikini y le acaricie la verga. Inmediatamente, Ricardo se quito el bikini y me dejo ver su hermosa verga. Yo le comence a mamar la verga muy despacio mientras el hacia unos deliciosos quejidos y pujidos. Le acariciaba el culos y metia el dedo por la ranura del ano subiendo y bajando, produciendo en el unos exquisitos murmullos de placer. Le lamia los huevos con la ternura con que hubiera lamido un helado de chocolate, y le acariciaba las redondas nalgas con las fuertes yemas de mis dedos. Poco a poco lo fui excitando cada vez mas. El me acariciaba la cabeza, y de repente, dio un grito y expuso el gran chorro de semen, el cual me lleno la boca, y me hizo que se me rebalsara por las comisuras de los labios. Como Ricardo ya se habia quitado la camisa, subi, lamiendo lentamente el ombligo, el pecho y termine mordisqueandole las tetillas. Despues de esto, Ricardo, me acaricio el pubis y me empezo a mamar la verga. Pasaba su lengua por mi vello pubico, y de vez en cuando lamia la parte que hay debajo de los huevos y antes del ano, lo cual me provocaba gritos de placer. Cuando le avise a Ricardo que estaba a punto de eyacular, el se puso mi verga en el pecho, y le bañe el pecho de mi liquido blanquecino y caliente, recien salido de mis huevos. Despues de esto, Ricardo me conto que yo le habia gustado desde que me conocio, y que no sabia como reaccionaria si el me insinuaba algo; pero entonces, cuando fuimos al gimnasio, el se dio cuenta que yo lo observaba de reojo, lo cual lo excito, e hizo que me siguiera el juego cuando empezamos a hablar de ropa interior. Despues de esto, Ricardo y segimos siendo muy buenos compañeros de oficina y amigos. El tiene su novia y yo la mia, pero de vez en cuando, despues de vernos en el gimnasio, nos vamos juntos a "hacer cosas de hombres"....