Gay Erotic Stories

Después de una interesante visita al Johnson Space Center en Houston nos dirigimos hacia San Antonio para visitar a Papi Patrick. Llegamos a los límites de la ciudad alrededor de las seis de la tarde y nos demoramos un poco hasta que al fin dimos con la dirección. Le vimos agitar su mano desde una ventana. Golpeamos a la puerta de todos modos y en seguida vimos este enorme hombre cuarentón e increíblemente atractivo que nos saludó afablemente: "Bienvenidos, soy Jared, el hermano menor de Patrick. Pasen y pónganse cómodos, están en su casa. Él está ocupado en la cocina y vendrá dentro de poco". John no había visto a Jared desde que era un adolescente, tenía puesta una camisa negra, abotonada sólo hasta la mitad dejando ver su majestuoso pecho peludo, las mangas estaban arremangadas mostrando sus fuertes y velludos antebrazos. Tenía una barba estilo candado que servía de marco perfecto para su sensual sonrisa. Sus ojos eran marrón oscuro y su frente se extendía hasta casi la mitad del tope de su cabeza. Sus pantalones vaqueros revelaban que era un hombre muy bien desarrollado en todos los sentidos. Papi Patrick salió de la cocina y nos saludó. "¡Al fin llegaron! Estoy super contento de tenerlos aquí". Mientras le daba la mano a John nos dijo: "Por la cara que tienen veo que mi hermanito les causó una gran impresión". Luego me abrazó fuertemente dejando deslizar su mano izquierda sobre mi glúteo derecho y mientras lo apretaba firmemente susurró en mi oído derecho: "Prometo que la vamos a pasar muy bien". "Jared sigue siendo un poco tímido pero una vez que agarra confianza ya van a ver. Él vive en Phoenix pero está de visita por pocos días. Cuando tenía 20 años formó parte de un rodeo en Laredo, después pasó un tiempo en el mundo militar siguiendo los pasos de nuestro hermano mayor, Jim, pero eso no fue vida para él. ¡Oh, perdónenme si hablo demasiado! No les he dado la oportunidad de decir ni una sola palabra, es que estoy muy emocionado". "Si ustedes piensan que soy muy mandón, es porque no se han topado con Jim. Él es todo un personaje. Se enlistó en la marina de guerra y sirvió muchos años en portaaviones, después de ser dado de baja comenzó un negocio de telecomunicaciones y le fue muy bien. Ahora está jubilado y vive en Fort Worth . No le hemos visto en muchos años. Es un individuo muy recio y estricto, si él insiste en compartir su amante de turno con sus camaradas, no hay manera de hacerle cambiar de opinión. Su muchacho tiene que chupar lo que él le diga y si Jim pone a sus amigos en fila, más vale que el pobre tenga su culito muy bien lubricado, pues lo que le sale es verga pareja y deberá complacerlos a todos sin chistar. Por eso no es de extrañar que nuestro hermano sea tan popular entre sus ex-camaradas de armas, él tiene un gran corazón y comparte con sus amigos sin límites". Después de escuchar esto último no pude evitar tener una erección. Lo que Papi Patrick contó sobre su hermano mayor no fue muy diferente de lo que John me hizo hacer con sus amigos más cercanos hace pocas semanas. No sabía en qué dirección mirar, la presencia de Jared no era de mucha ayuda para hacerme perderla. "El compañero de Jared fue operado de una delicada cirugía en la espalda que implica un período de recuperación de seis meses. A mi pobre hermano no le gusta tener sexo con cualquiera y ya lleva cuatro meses sin disfrutrar de ningún culo... ¿Pueden ustedes imaginarse eso? Un semental como él… tenemos que ayudarle antes de que sus bolas de toro se le estallen". Jared se ruborizó al escuchar a Papi Patrick hablando así sobre su vida privada. "Mira Jared, ahora que somos como familia, estamos aquí listos para ayudarte". John me miró y agregó: "Estoy seguro de que Federico con mucho gusto ayudará a su necesitado 'tío' en todo lo que se le ofrezca. Te garantizo que él sabe cómo hacer feliz a un hombre". Ahora fui yo quien se ruborizó… "Ya sabes que no estoy esperando ninguna respuesta Federico, después de todo como mi hijo me debes obediencia absoluta. Jared, te doy mi bendición para que pases una noche entera con mi muchacho y hacer con él lo que te salga de los cojones. Ahora depende de tí si él te gusta o no". Papi Patrick interrumpió, "John no se te olvide que esta es mi casa y tengo derecho a la útlima palabra en todo. Es absolutamente normal que Jared se vuelva loco por un culito rico como el de Federico, pero debes saber que a él también le gustan culos de hombres maduros... así que tal vez tengas que poner de tu parte también. Yo le conté a Jared sobre nuestro largo fin de semana después del Día de Acción de Gracias. ¿Por qué crees que vino de visita? Una imagen vale mil palabras…" Apenas terminó de decir eso, Papi Patrick encendió el televisor y presionó el botón de la videocasetera. Ahora realmente estuve estupefacto, no sé cómo él se las ingenió para colocar una cámara oculta en el dormitorio de John y registró lo que pasó durante la primera noche entre nosotros. Los ojos de Jared estaban en trance y ardiendo en lujuria mientras miraba cómo su hermano me hacía suyo. Papi Patrick detuvo la cinta justo en el momento en que se veía como derramaba sus chorros de leche en mi boca. Yo esperaba que John exigiera una explicación sobre el origen de esa cinta, pero todo lo que atinó a decir fue que él quería tener una copia. Ningunos de nosotros imaginábamos entonces que seis años después Jared partiparía en películas pornográficas. La primera vez que lo ví en una de ellas fue un poco difícil de reconocerle porque tenía un grueso bigote en forma de herradura y tenía la cabeza afeitada totalmente. "Dejemos esto hasta aquí, cenemos antes de que se enfríe la comida que preparé... seguro que deben estar hambrientos después de tan largo viaje". Papi Patrick había preparado una comida Tex-Mex. Nunca había probado algo similar y a pesar de no estar acostumbrado a la comida picante, realmente la disfruté. Después de cenar saldríamos al centro de la ciudad. Cuando Jared estaba a punto de levantarse, Papi Patrick derramó accidentalmente el contenido de un platillo sobre la camisa y pantalón de Jared. "Mierd... voy a tener que cambiarme de ropa. Vente conmigo Federico, necesito de tu ayuda". Yo no sabía que sería una excusa para estar a solas tan pronto… Jared se libró de su camisa y pantalones. Quedó delante de mi usando un boxeador rojo brillante hecho de lycra y algodón. Su velludo torso era simple y llanamente magnífico, sus pechos eran un poco caídos pero no me importó en lo absoluto. Sus piernas eran muy fuertes y muy bien formadas. Mis ojos examinaron cada esquina de su impresionante cuerpo masculino. Toda mi atención se concentró en su enorme bulto. Había una mancha húmeda donde estaba la punta de su pene. Él se volvió y abrió el armario preguntándome que pantalón y camisa quería yo que él usara. Entonces pude apreciar que encima de todo tenía un culo muy bien formado. Papi Patrick y John gritaron desde la sala de estar: "Hey, no se demoren mucho o no vamos a conseguir un buen puesto". Fuimos a un club de baile de "square-dancing" sólo para hombres. No tenía idea de que un lugar como este pudiera existir en una ciudad relativamente pequeña como San Antonio . Jared tenía puesto sombrero, chaleco y cubrepiernas de cuero negro, todo combinado entre sí. Su cinturón tenía una hebilla de plata muy grande. Él se veía absolutamente super sexy vestido de pies a cabeza como un vaquero urbano. Después de beber algunas cervezas tuve que ir a los urinarios. No había nadie, lo que fue un gran alivio porque por mi timidez me cuesta orinar si tengo alguien a un lado. Oí que alguien entró detrás de mí, era Jared. Él desabrochó sus pantalones y muy orgulloso expuso su impresionante miembro viril, confirmando lo que yo ya sospechaba sobre su dotación. "¿Te gusta lo que tengo aquí entre mis piernas 'sobrinito'? ¡Ve sabiendo que va a ser todo tuyo!. Patrick me había dicho que sabes chupar verga como todo un profesional. Pensé que él exageraba pero no puedo sacar de mi mente lo qué vi en ese video. Se nota que disfrutas que te den por el culo. Quiero oírte gemir de placer con cada movimiento de mi gruesa verga penetrándote hasta el fondo... Me gustó especialmente ver cómo te tragaste su leche. Me dijo que tienes el culo más caliente que se haya cogido jamás. Apenas puedo esperar para comprobar lo que me dijo. Ya vas a ver lo sabroso que te voy a coger." No pude articular palabra alguna, era más que evidente que yo le gustaba. Miré fijamente su verga y fácilmente tenía unos 16 centímetros en estado flácido. Tan sólo me quedaba rogar que no se le pusiera tan gruesa como la de Joachim. Ese fue el desafío más grande durante esa noche interminable en la que los amigotes de John uno tras otro me penetraron cuantas veces quisieron. Esa monstruosa verga estiró mi pobre esfinter hasta el límite, a pesar de que Joachim fue muy considerado mientras me tuvo a su merced, realmente no querría repetir esa experiencia. Para ese entonces tan solo quería salir del urinario cuanto antes… Pujé y pujé pero el resultado fue que dejé escapar un sonoro gas. ¡Trágame tierra! Fue la situación más embarazosa que jamás podría haberme imaginado. Seguramente fueron los frijoles en la comida Tex-Mex. Jared simplemente se rió histéricamente. Otros hombres entraron al urinario, él se enserió y finalmente salimos. Volví a la mesa donde John y Papi Patrick estaban sentados con una vista abierta del área de baile. Jared se hizo espacio en la fila delantera así que teníamos contacto visual con él. Sus movimientos eran muy ágiles, era un enorme placer mirarlo mientras que hacía todos esos sensuales movimientos con sus caderas y me hacía un guiño cada vez que nuestros ojos hacían contacto. Por supuesto que muchos otros hombres no le quitaban los ojos de encima pero él tenía solamente ojos para mí, me hizo sentir muy especial. Era casi medianoche para el momento en que estábamos de regreso a la casa de Papi Patrick. Jared estaba en el asiento trasero conmigo; su pesada mano derecha posada sobre mi muslo izquierdo cerca de mi rodilla. El ajetreo del baile hizo que sudara mucho y el olor de sus prendas de cuero combinado con su sudor y varonil colonia fueron como un afrodisiaco para mí. Su esencia masculina le dio vida a una voz que dentro de mí exclamaba: "Este machote te tiene ganas y tu deseas complacerle en todo. Anhelas chuparle esa enorme verga, volverlo loco de placer hasta recibir sus chorros de semen como única recompensa. Necesitas que te la meta hasta el fondo y sentir cómo sus bolas golpetean tu culo mientras gimes de placer, pidiéndole que no se detenga..." Con el pasar del tiempo Jared movía su mano cada vez más cerca de mi entrepierna. Fingí estar distraído disfrutando de las luces de la ciudad cuando en realidad luchaba para permanecer en calma y no prestarle atención a mis sucios pensamientos. "¿Te sientes mal? Estás tan silencioso". Él colocó su fuerte brazo derecho sobre mis hombros y me presionó contra él. "No Jared, estoy bien, no pasa nada..." Finalmente llegamos a nuestro destino; mi corazón latía muy fuertemente. Sabía que al pasar el umbral de esa puerta en poco tiempo estaría a merced de los bajos instintos de estos tres hombres, tan sólo me preguntaba quién daría el primer paso y qué querrían de mí. Nos sentamos todos en la sala de estar y charlamos un rato. Sin tener nada que ver con la conversación Papi Patrick me dijo: “Bueno muchachón, se está haciendo tarde. Pienso que es tiempo de que te lleve al cuarto de baño y prepare tu culo para Jared". "Hey, yo soy mayor de edad y puedo hacer eso por mi propia cuenta sin ayuda de nadie abuelo". "¡Mire jovencito, así no se le habla a sus mayores. Esto exige una acción disciplinaria inmediata. Voy a tener que enseñarte a tenerme respeto. Baje sus pantalones y dóblese sobre mis rodillas… ¡AHORA! " Miré a John y no chistó palabra alguna para defenderme. "Está bien Patrick tienes mi bendición, él tiene que aprender buenas maneras por las buenas o por las malas" "Ya oyó a su papa, le voy a dar bien duro por ese culo con las palmas de mis manos". Una vez que estuve en posición, John tiró hacia abajo mi ropa interior dejando expuestas mis nalgas para el duro castigo. "¿Prometes obedecer a tus mayores? " "Sí" "¿Sí qué? No te escucho jovencito". "Sí Señor" "Así está mejor" "Estás listo para obedecer y hacer lo que se te diga" "Sí Señor" "Te gusta chupar las vergas de tus mayores y degustar su leche caliente" "Sí Señor" "Lo vas a tener que demostrar..." Para ese entonces mis glúteos deben haber estado muy enrojecidos, sentía como el torrente de sangre palpitaba fuertemente en el área castigada. "Está bien hermano, no le azotes más, puedes llevártelo para el cuarto de baño si eso te complace. Sé que eres muy meticuloso..." "Ya escuchó a Jared jovencito, me voy a cerciorar de que ese culo sea digno de la verga de mi hermano". "Levántese y súbase los pantalones… ¡Hey, hey, hey, miren esto! ¡El mariconcito este tiene una erección! ¿Qué hacemos al respecto John?" "Pon de nuevo el video que nos mostraste y mientras tanto que nos chupe las vergas" "¡Gran idea John!". Más rápido que volando los tres bajaron los cierres de sus pantalones dejando sus erectas vergas expuestas y se sentaron en el sofá de tres puestos. "Ya sabes qué hacer mijo, comienza con Patrick. Demuéstrale que realmente aprendiste la lección". "Oh sí! Chúpeme muy bien esa verga. Uff, qué rico, así es como se hace. Esto es lo que necesitaba, con cuidado que no quiero que me haga acabar... así esta bien por ahora, ande y chúpele la verga a su papi". Mientras lamía la verga de John pude escuchar mis propios gemidos por los altavoces de la TV, supongo que debe ser el momento en que Papi Patrick y John se turnaron para cogerme bien duro. "¡Detente! ¡Detente! Yo tampoco quiero que me hagas acabar. Hazte cargo de la verga de tu tío que bastante falta le hace". La verga de Jared se sentía muy caliente y palpitante. Estaba dura como roca y manaba abundante líquido preseminal de su meato. Sin vacilación alguna me puse de rodillas y metí su verga en mi boca saboreando su masculino néctar. Su cuerpo temblaba mientras que mi cabeza subía y bajaba sobre su verga. "Mira eso Patrick, mi muchacho sabe realmente sabe como satisfacer a Jared. Ésto merece ser grabado" "¡De cojones que sí! Tengo la cámara de vídeo lista para ocasiones como esta". Jared me apartó suavemente, se levantó y tiró hacia abajo sus pantalones y boxeadores rojos. Además de un magnífico pene tenía enormes bolas que colgaban muy bajo. "¿Te gustan mis bolas? ¡Lámelas! ¡Toma una a la vez en tu boca! ". Él tenía sus piernas abiertas como el Coloso de Rodas y me acuclillé justo debajo de él, manteniendo mi equilibrio asiendo sus fuertes piernas velludas. "¿Hey John, por qué no me mamas la verga mientras tu hijo se hace cargo de mis bolas?" "Por supuesto! Esperaba que me lo pidieras". Un rato después, John y yo estábamos arrodillados frente a Jared, nos besamos profundamente por un breve instante y abrimos nuestras bocas bajando nuestras quijadas para que Jared introdujera su verga entre nuestros labios, sus manos mantuvieron nuestras cabezas unidas. "¡Esto siente de puta madre! Ambos hacen un gran equipo. ¡Oh, oh Dios mío! Tengo que acabar, tengo que acabar". Él soltó nuestras cabezas. "¡De prisa Federico! Tóma la verga te tu tío en tu boca". "Anda Jared, derrama tu leche en su boca, no se va a desperdiciar ni una sola gota de tu simiente". Jared agarró mi cabeza firmemente con ambas manos hasta que dejó escapar un ensordecedor sonido gutural, inmediatamente su jarabe agridulce inundó mi boca. "Eso es, cabroncito. No te suelto hasta que te tragues toda mi leche, sé que te gusta!". Cuando al fin se detuvieron los torrentes que casí me hicieron ahogar, se sentó de nuevo en el sofá, se inclinó hacia adelante y me besó profundamente. "¡Ay, muchacho! Realmente sabes cómo hacer a un hombre feliz. Ardo en deseo de lamer tu pulsante agujero, ponerlo bien húmedo y meterte mi grueso rolo hasta el fondo, sé que lo vas a difrutar". "¡Que tomas tan calientes muchachos las que pude hacer con la videocamara!. Federico, venga conmigo al cuarto de baño que el tiempo se pasa volando". Una vez en el cuarto de baño, Papi Patrick se quitó toda su ropa excepto sus calzoncillos. "¿Qué está esperando? Desnúdese por completo, quítese toda su ropa que lo quiero ver en pelotas". La escena fue un déjà vu de mi primer día con John, sólo que esta vez no estaba asustado. Él asió el inyector de ducha anal, lubricante y me guió hacia la ducha… Cuando me sentaba en el retrete para expeler el agua que había bombeado dentro de mis entrañas, él se colocaba delante de mí, tiraba hacia abajo su ropa interior y me abofeteaba con su pene erecto, después me asía por la cabeza con ambas manos y apuntaba su pene hacia mi boca. "Eso es muchacho, tome mi verga con su boca caliente, usted ya sabe cómo me gusta que me la chupen". Después del tercer enema se cercioró de que mi culo estaba inmaculado. "No se crea que hice todo esto por amor a mi hermano, ahora mismo cobro mi parte... vamos presénteme ese culo y relájese, esta es mi casa y se hace lo que yo digo, después de todo me lo va a agradecer, esto es apenas un preparativo más... ya vio cómo es de gruesa y larga la verga de Jared. Quiere montarte cuanto antes y después de esto ya tu culito no va a estar tan apretado ja, ja, ja". Papi Patrick empujó su miembro hasta el fondo y comenzó a cogerme muy lentamente. "Oh sí, cómo amo este culito… en mis noches de soledad me doy pajazos viendo nuestro vídeo, anhelando momentos como este". Él comenzó a cogerme duro y más rápidamente, tapó mi boca con su mano izquierda mientras que tiraba mi cuerpo contra el suyo con la otra mano. De pronto me empujó e hizo virar rápidamente. "Arrodíllese y abra bien esa boca de par en par! Te la voy a llenar con mi esperma caliente. Ahhhh, ahhh, sí, así jovencito. Tráguese toda mi leche, Ud. sabe quién manda aquí". Puso sus manos debajo de mis axilas y me ayudó a ponerme de pie, besándome profundamente. "No me tenga resentimientos, que yo lo quiero mucho más de lo que piensa". Se vistió y tomó mi ropa consigo. Antes de salir del cuarto de baño me dio un suspensorio blanco y dijo: "Enjuáguese bien ese culo para eliminar los restos de lubricante, se seca y va a ponerse esto. No se le olvide usar el enjuague bucal para que tenga aliento fresco. Voy a decirle a Jared que ese culo ya está listo para ser usado a placer...". CONTINUARÁ